Sunday, November 19, 2017

3 días de diciembre

Fotografía inédita: Nikon D700 + Nikkor 24mm (2.8). Londres, 17 de Diciembre 2010

Ante todo que quede claro que no me gusta mirar atrás. Soy una persona un tanto melancólica pero, por encima de todo, alegre, optimista y siempre mirando hacia delante. No creo en las casualidades, suena a tópico pero es cierto. Creo que todo tiene un sentido y a nosotros nos corresponde buscar las respuestas. Filosofía aparte, la ‘era digital’, tan criticada, ha propiciado que encontrara una vieja fotografía de diciembre 2010. Siempre obsesionado con la fotografía física, el papel contra la infinidad de archivos que acumulamos sin sentido en nuestro ordenador, esta vez me ha jugado una buena sorpresa. Como que 'las casualidades no existen', he pensado en recuperar esos “tres días de diciembre”y contar la verdad de aquellos días que me cambiaron como persona y me hicieron un poco mas maduro.

Miércoles 15 de diciembre de 2010, llego a casa hacia las 20 como de costumbre, me conecto a Facebook y abro el chat a ver quien está disponible para charlar. Mis compañeros de piso están ya en sus habitaciones y como siempre, me toca cenar solo con toda la casa en silencio para mi. Justo cuando llega la hora de acostarse se publica una noticia en el muro: ‘Paul McCartney dará un intimo concierto en el 100 Club el proximo viernes 17 a la 13 del mediodía. Pertenece a una campaña para salvar el club centenario contra la intención de derribarlo. Entradas a la venta el día 16 a las 10 de la mañana con un único precio de 60 libras, sólo por internet’. Se me iluminan los ojos! Veo que se trata de Londres y busco donde se encuentra ése 100 Club. Si! En pleno Oxford Street! No me lo puedo creer! Justo antes de acostarme hago los pertinentes preparativos para la mañana siguiente y añado el portátil para seguir la venta de las entradas a las 10 de la mañana. Jueves 16 de diciembre, me levanto temprano como siempre. El sol sale muy pronto y la falta de persianas me hace levantarme sin la necesidad de despertador. Almuerzo de cereales y leche con miel. Hace mucho frío y la previsión es de nieve al final de la semana.Tomo el nº 13, como de costumbre, que me lleva hasta Oxford Street. Esa mañana, excepcionalmente, localizo el 100 Club en pleno corazón de la ciudad justo antes de Tottenham Court Road muy cerca de St. Giles, la escuela donde estoy cursando el Teacher Training. Mejor impossible!. Entro en un Starbucks en frente del local del concierto y me conecto a internet justo a las 10 de la mañana. Pero no hay suerte, se me cuelga varias veces y me es impossible acceder al sitio web. Cuando consigo conectarme un mensaje me dice que las entradas se han agotado. Como? Si no han pasado ni 10 minutos! Salgo del Starbucks, cruzo la calle y entro dentro de la finca del nº100 de Oxford Street. En el portal me cruzo con una persona que resulta ser el propietario. Le pregunto por las entradas y me dice que ya no quedan. Me quedo un rato inspeccionando los bajos del local donde se dará el concierto y me sorprende por lo pequeño que es. Cuando estoy a punto de salir entra el cartero en la finca y literalmente me lanza un gran paquete de cartas en el pecho. Le digo que no soy de allí y se va. Pienso en aquellas cartas, quizá alguna pueda tener alguna entrada y me escondo el fajo de cartas dentro la chaqueta. Consciente de la locura que estoy haciendo voy a clase como de costumbre hasta las 16. Luego hago la segunda locura del día. Pienso que quizá estaría bien dejarse caer por la parte trasera del 100 Club para ver si se cuece algo. És prácticamente de noche, hace un frío tremendo y empieza a caer agua nieve. De pie, en frente de un portal cercano, me parece oír a Paul. En efecto, es la prueba de sonido y estoy seguro que oigo su voz. Aunque intento entrar y bajar las escaleras al final no tengo valor. Al día siguiente constato que en efecto era él. Estoy ahí esperando durante quizá un par de horas hasta que no puedo mas. Estoy completamente helado! Vuelvo a casa y me encierro en mi habitación, me siento en el suelo encima de la moqueta justo al lado del radiador y voy abriendo las cartas una por una. Nada! Las vuelvo a cerrar y las tiro de nuevo al buzón. 

Inciso: 
Lo que ocurrió el día del concierto esta ampliamente contado en la entrada publicada en este blog; “Paul at 100 Club", así que no voy a repetir nada pero si que voy a añadir detalles que no conté en su día: 

Poster del concierto

Hay que decir que aquel 17 de diciembre de 2010 salí de casa esa mañana a primera hora dispuesto a coger algún autógrafo de Paul. No pensé que podría entrar al concierto. Llevé un par de vinilos; ‘Abbey Road’, una primera edición británica de 1969 con un error de imprenta muy buscada, ‘McCartney’, otra primerísima edición también británica de 1970 (justo el culpable de mi pasión por la fotografía), una partitura de ‘Dear Prudence’ con las fotos del álbum blanco y como de costumbre, mi nueva reflex Nikon D700 con el angular 24mm. Justo aquel viernes se graduaban las profesoras que teníamos en el grupo del Training y también era el ultimo día antes de las vacaciones de Navidad, así que la fiesta estaba asegurada. Con una de ellas, Kitty Woo, llevaba flirteando desde hacia semanas y esa era mi oportunidad. Pero los planes se cruzaron momentáneamente y fui al concierto no sin antes ver a Paul entrando en coche por la puerta trasera. Nadie me registró, había un poco de descontrol, podía haber llevado alguna arma y nadie se hubiera dado cuenta. No creo que fuéramos mas de 200 personas. Una vez a dentro, después de mi momento de gloria y de tomarme una pinta, llamé a mi madre justo durante los coros finales de ‘Hey Jude’. Tenia que compartir aquel momento inolvidable con alguien y pensé en mi madre. Luego me acerque a una esquina para poder coger un autógrafo y conocí a una pareja de españoles justo cuando sonaba ‘Get Back’. En esa esquina saque mi cámara y tomé un par de fotografías angulares, justo la perspectiva perfecta con el escenario, el publico y la escasa distancia que los separaban. Sólo tome un par, o quizá tres. Pensé que si me veían los de seguridad me requisarían la cámara por eso no hice mas. Solo aquella perspectiva. Recuerdo que en una o dos de ellas las fotos estaban subexpuestas y las borre automáticamente, por eso olvide la existencia de una tercera bien expuesta y la foto quedo archivada hasta ahora. Volviendo al concierto, es cierto que justo en ese momento detrás mío encontré a Ron Wood y le grité como si estuviera lejos pero lo cierto es que estaba muy cerca. Creo que se asustó. Finalmente intente conseguir un autógrafo, Paul me cogió la mano derecha para firmar pero las vallas cedieron por la presión de la gente y se marchó rápidamente. Una lastima! Sobre las 16 de la tarde salí del local y fui hacia el pub ”The Swan” justo detrás del colegio en Russell Square donde la fiesta de graduación había empezado. Aunque la hora pueda parecer extraña, en Inglaterra es muy habitual salir de clase o del trabajo los viernes a primera hora de la tarde hacia el pub mas cercano. Una postal muy británica que llevaré siempre conmigo. Aun lleno de emoción, conté a mis profesoras y a los compañeros de clase lo que acababa de vivir hacia pocos minutos. Con la emoción aun bien visible, me tome un par de pintas y el alcohol me subió muy rápido. Me sentía eufórico y mi inglés brotaba con fluidez. En el baño inferior del local me crucé con Kitty, una de las profesoras. Una preciosidad Galesa con los ojos verdes y el pelo castaño que se volvía rojizo al sol, un perfil muy habitual en Gran Bretaña. Llevaba un jersey verde de lana escocesa muy parecido a uno que tenía y todavía conservo. Aquellos jerséis se convirtieron en nuestro símbolo y fueron un poco nuestro principal nexo de unión. En el sótano, después contarle lo vivido terminamos besándonos. La mañana siguiente Londres se levantó completamente blanca. Una fuerte nevada, que duró prácticamente todo el fin de semana, paralizó todo el país, el aeropuerto de Heathrow y varios aeropuertos de media Europa. Aquellas Navidades mucha gente no pudo volver a sus países y quedaron atrapados, muchos de ellos durmiendo en las despensas aeropuertoarias. Yo tuve suerte, mi querido aeropuerto de Luton, al ser el mas pequeño, se salvó de la falta del liquido anticongelante para refrigerar los aviones. 
Love from UK! 

Fiesta graduación: Kitty (clad in green). Londres, 17 de Diciembre 2010

November 2017

Tuesday, March 13, 2012

Visiting Abbey Road...!

Mi vuelta a Londres no podía tardar y a la vez sabía que debía tener una buena, muy buena escusa para volver. Pero cuando en enero oí la noticia que los Abbey Road Studios se abrían al público durante un par de fines de semana  para conmemorar el 80 aniversario, me dije a mi mismo, ésta era la mía. La primera cosa agradable que percibo al llegar a Londres es su luz particular. De repente una agradable sensación de anhelo y bienestar se apodera de mí en el bus hacia el centro de Londres. En Londres el sol, en lucha constante con las nubes, se deja ver creando una atmósfera lumínica única. La segunda, las casas, su particular manera de construirlas y su alineación constante, fantásticas! Estas son mis primeras agradables sensaciones en tierras Británicas. Para aprovechar los últimos rayos de sol del día decido bajar hasta Hyde Park vía West Hampstead & Notting Hill. Lo cruzo andando Bayswater Road, hasta llegar a Oxford St. Tras un breve pero intenso trayecto por el Soho, vuelvo a casa para cenar con mis excompañeros. Por fin llega el gran día, me levanto pronto, aún así llego a los estudios Abbey Road con retaso, tras un corto trayecto en bus decido coger un taxi que me lleve a destino pero hay tráfico. Otra de las cosas insólitas de Londres es que puedes cambiar de sentido sin prohibición alguna, así pues el taxista me pide permiso para hacerlo y le doy el ok. Llegamos justo a tiempo, las diez de la mañana. Por mi sonrojo, el taxista se mete dentro de la entrada de los estudios y unas 50 personas me miran con atención. Deduzco que el taxista se cree que soy un pez gordo de la fotografía y me lleva hasta dentro. Que vergüenza! Mi minuto, segundo de gloria absoluto! Vuelvo a la realidad y me meto al final de la cola. Como siempre el muro repleto de grafities por todas partes, aunque se pinte una vez por semana, la peregrinación es constante. Llega el momento de subir las escaleras….the four strangers sentados on top of the stairs! Cruzo un largo pasillo hasta llegar a la entrada del estudio nº 2, delante mío aparece un enorme sala….tal como la imaginaba, tal como la había visto millones de veces en fotografías. Como siempre soy el último en llegar y el estudio está repleto de gente de arriba abajo. Empiezo a fotografiar todo lo que veo, a un lateral expuestas varias reliquias del estudio, micrófonos, mesas de mezcla, bobinas. En medio un gran escenario donde se va a dar la charla en breve. Al otro lado una pequeña selección de pianos. En particular un bonito piano de cola Steinway. Merchandasing del estudio y como no, la sala de control a lo alto del estudio. Al principio no soy consciente de la grandeza del momento. Pero debo decir honestamente que las paredes transpiran el peso de la historia. Ésa sensación me acompaña a lo largo de las dos horas y media que estoy en el estudio. Empieza la charla (lecture) y a medida me voy poniendo en sintonía con el local. Me doy cuenta que tengo suficiente material fotográfico, llega la hora de relajarme y dejarme llevar por la historia sin mas. Hay aproximadamente unas veinte calles en Londres con el nombre de Abbey Road, aunque la que nos interesa se encuentra en el distrito de St. John’s Wood, el cual recorre de noroeste y suroeste a lo largo de dos kilómetros de asfalto. En 1830 se construía en dicha calle una serie de casas adosadas de estilo Georgiano, pensadas casi como pequeños hostales de nueve habitaciones con sus recepciones, cuartos de sirvientes, bodegas y jardines. En diciembre de 1929 EMI compró el edificio que corresponde al nº 3 de la calle con vistas para transformarlo en los primeros estudios de grabación del mundo hechos completamente a medida. Dos años de trabajo fueron necesarios para reconfigurar el espacio del edificio. El jardín de la casa y de los bloques colindantes fueron sustituidos por tres estudios de tamaños diferentes, cada uno para albergar los diferentes estilos y categorías de música que se gravaban por aquel entonces.
El “Studio one” es el estudio de grabación mas grande que existe. Tan grande es que puede albergar cómodamente una orquestra de 110 instrumentos y un coro de un centenar de personas al mismo tiempo, hecho por el cual es atractivo para organizar conciertos y espectáculos en directo.
El “Studio two” puede ser perfectamente el estudio de grabación más famoso del mundo. Con un diseño y una acústica únicos, puede albergar hasta 55 músicos en su interior, aunque lo que le haría famoso a lo largo del globo es que fu aquí donde The Beatles grabaron sus álbumes entre 1962 y 1969 (excepto “Let it be” y algún tema del “White álbum”.
El “Studio three”, por su parte, es el más íntimo y recatado de todos, aunque de versatilidad idéntica al de sus dos hermanos mayores. Y es que fue en este estudio tres donde Pink Floyd grabó discos como “The dark side of the moon”. Cuenta con una de las salas de mezclas más grandes de Inglaterra, el estudio 3 fue además de los pioneros en la grabación y mezcla de música en 5.1
Pero fue en 1962 cuando George Martin, ya reputado productor y director de “Parlophone” (una filial de EMI), conoció a cuatro jóvenes de Liverpool que lo cambiarían todo, The Beatles. Ese mismo año grabarían en el estudio nº 2 su primer single “Love me do”. El resto, como se suele decir, es história. Durante los siete años siguientes cambiaron por completo el calendario de grabaciones de “EMI studios”. Cuando entraban, no salían hasta que hubieran terminado lo que tenian en mente, que básicamente, y bajo su supervisión de George Martin, venía siendo un single cada tres meses y dos álbumes completos cada año. Revolucionaron las técnicas de grabación en los estudios, que comenzaban a incorporar en sus instalaciones unas revolucionarias mesas de mezclas de 16 y 24 pistas. En 1969, The Beatles se reunirían de nuevo para sacar su último álbum como grupo “Abbey Road”, hecho determinante para la historia de los estudios, ya que debido al éxito del trabajo (se convirtió en su disco más vendido hasta la fecha), finalmente el nombre de “EMI Recording Studios” fue cambiado por el de “Abbey Road Studios” a principios de los 70’s.
Recientemente, a raíz de problemas económicos, el gobierno Británico declaró los estudios Abbey Road monumento nacional, lo cual impide que el edificio pueda ser derruido. Y es que pocos sitios en el mundo hay que hayan visto pasar desde tan cerca el avance de la historia de la música. Las paredes de Abbey Road pueden dar fe de ello, lástima que no hablen. Durante la charla, compruebo la dimensión de la música grabada entre esas paredes, con nombres que ni conocía. Dividida en varias partes, quizá la mas interesante sea la visual y auditiva. Todo ello con un par de narradores con un Ingles perfecto para mí, rico en contenido y agilidad. Admito que la parte de los Beatles, a mi gusto, fue la menos interesante, aunque estaba sentado en la esquina donde solían grabar. Pudimos comprobar la magnífica acústica del local con el sonido de los pianos y las cómodas viejas sillas rojas de la época de EMI. Llega la hora de partir, me despido de ése sitio…mágico, salgo por la puerta y the four strangers siguen sentados a lo alto de las escaleras, como si el tiempo no hubiera pasado. Me despido de ellos, de todo…hasta siempre! “…and in the end the love you take is equal to the love…you make…”
                    "the four strangers" by Linda McCartney, August 1969


Tuesday, May 3, 2011

Love from UK

Arriba l’hora de tornar a casa.
Han estat 7 mesos impresionants e irrepetibles.
He viscut les experiències mes increíbles que he tingut mai.
He trobat respostes a moltes de les meves preguntes existencials i el mes important; he trobat una part de mi que tenía perduda per UK. En el fons no m’ha sorprès res del que he vist. Tal com m’ho imaginava. Artisticament he trobat molt d’afecte i suport en tot moment. M’he sentit molt mes reconegut que a casa meva.
Agraieixo a tota la gent que he conegut a Londres que m’ha fet sentir com un londinenc mes.
A Londres per el seu temps boig. Un hivern molt dur i una gloriosa primavera. La ciutat del equilibri perfecte!
La gent de pas anónima que m’he trobat durant el meu dia a dia que m’han fet sentir molt feliç amb el mes mínim detall. Als Hare Krsna cantant per Oxford Circus i responsables de un menjar boníssim!
A Bayeux, fantastic laboratori fotogràfic responsables de grans fulles de contacte i especialment al Terry, el seu director per la paciencia amb mi. Un gran treball!
A James Hyman Photography gallery per unes obres genials. Especialment la primera “Canned candies”. Quina sort de poder trobar el llibre del 1969! Impresionant!
Als Trident Studios del Soho on vaig tenir la oportunitat de visitar-los. Gràcies per el magnífic tour i a tots els grans músics que van grabar molta música de la meva vida.
Gràcies al porter del 100 club (fuckin’ bastards) que em va donar la oportunitat única de veure un concert del Paul McCartney irrepetible per 150 afortunats. Les noies que em van rebre entrant a dins el local (“I can almost remember their funny faces…”). Dir-li al Paul que nomès volía un autógraf però no em van sortir les paraules….de fet em vaig quedar en blanc.
Al George Martin per una vida plena de glória.
A la Pattie Boyd pel seu encant i la seva mirada de ulls blaus impresionants…! (perdona rubia però no superes els de la meva àvia). A la comisària de la exposició The Abbey Road sessions. Un encant de dona, però podría ser el teu fill. A la rossa que em va demanar per casar-me amb ella la nit del casament reial a Londres. Una mica massa jove per mi però vam tenir una conversa molt intensa!
A Riffle gallery i al seu manager Robin per mostrar molt d’interès en la meva obra. Queda pendent exposar-la.
Als meus professors/es del teacher training, merci per la seva dedicació entrega (amb bones pintes i farres…).
La gent que vaig conèixer treballant de guia per Londres.
Al Jeffrey Turner, el meu lodger i persona encantadora desde el primer moment. Als meus companys de pis, per la seva calma i relax. Just el que necesitava
A la meva estimada llengua Anglesa. Les magnífiques cases Georgianes i Victorianes, sobretot les seves finestres…m’encanten!

…i gràcies a TU per il.luminar-me (una vegada mes).

Aquí no acaba la meva aventura…acaba de començar!


All the best!




 

Monday, April 18, 2011

McCartney 1970 (Spanish / English)

                                            Linda with Nikon F 1969

Todos tenemos un referente en la vida que nos descubre cosas, inquietudes, intimidades personales que creemos no tener pero en un momento dado surgen de la nada hasta llegar a ser algo muy grande. Filosofía a parte, mi amor por la fotografía surgió de la manera mas mágica que os podais imaginar. Fue un momento único en el tiempo. Jamás olvidaré el día que cayó en mis manos una copia del primer álbum de Paul McCartney tras finalizar con el grupo. Debía tener unos trece años, acabando el E.G.B. Dado que en mi casa nunca encontré nada a nivel artístico, tenia que recurrir a mis amigos colegiales para recopilar los discos y  grabarlos en los exentos casetes. Recuerdo muy bien ése día que me cruze con el álbum “McCartney” de 1970. Era una mañana de sábado de otoño y teníamos partido de futbol sala en el colegio. Ése día algo en mi cerebro se iluminó (nunca mejor dicho) y supe con certeza que eso iba conmigo. Al abrir la carpeta del disco descubrí el enorme repertorio de fotografías que iluminaron mi mente para siempre. Se trataba de un conjunto de imágenes tomadas por su esposa Linda McCartney, muy simples, sin retoque alguno, absolutamente familiares e espontáneas. Por aquel entonces todavía se creía en un concepto de portada e música (cosa que tristemente se ha dejado de hacer). Así pues la carpeta fotográfica del vinilo reflejaba la simplicidad de la música que hivamos a encontrarnos en el disco. Paul grabó gran parte del album debut en solitario en la sala de estar (living room) de su casa en 7 Cavendish Avenue de St. John’s Wood, Londres. Tocando todos los instrumentos y haciendo tareas de producción sin ningún tipo de mezcla alguna. Linda colaboro con sus deliciosas armonías vocales y por supuesto autora de todas las fotografías de la carpeta con su Nikon F y básicamente con un 35 y 135mm.
Ahí empezó todo, I love you LILY!

P.d. and now I’ve understood “the beautiful 4 o’clock pink    
        Scottish sun” so cute!!


 
                                     McCartney album back cover sleeve

We all have a reference point in life that we discover things concerns, personal intimacies that we do not have but at some point come out of nowhere to become something big. Philosophy aside my love of photography was the most magical way you can imagine. It was a unique moment in time. I’ll never forget the day fell into my hands a copy of Paul McCartney’s first album after finishing with the group. I must had been about thirteen years old, running out primary school. I didn’t find anything on an artistic level at home so I had to go to my college friends whose borrowed the albums and recorded in the exempt cassettes. I remember very well that day I collided with the album “McCartney” from 1970. It was a fall saturday morning and we had a football match in the school. That day something in my brain lit up and I knew with certainly that it goes with me. When I had opened the disc folder I discovered the huge repertoire of photographs that flashed into my mind forever. It was a set of images taken by his wife Linda McCartney, very simple, one touch, quite familiar and spontaneous. At that time still believed in a cover concept and music (which sadly no longer do). So vinyl photo sleeve have reflected the simplicity of the music you would find inside. Paul recorded much of his debut solo album in the living room of his house at 7 Cavendish Avenue in St. John’s Wood, London. Playing all the instruments and doing production work without using any mixing desk. Linda contributes with delicious vocal harmonies and of course she is the author of all photos in the folder with her Nikon F and mostly with 35 and 135mm. That started it all, I love you Lily!

P.d. and now I’ve understood “the beautiful 4 o’clock pink
       Scottish sun” so cute!!

Tuesday, April 5, 2011

Abbey Road (the album) 1969

El mejor álbum que se ha grabado jamás.Y no lo digo por ser fan del grupo. A mi me encanta ser objetivo. Creo que ésta es una de mis grandes virtudes, mi objetividad delante de numerosas situaciones de la vida. Por eso voy a hablar del disco de los Beatles de una manera objetiva, dejando de lado mi parte más freak y fanática y desgranando todos los detalles, desde sus orígenes, conceptos musicales, carpeta fotográfica….etc…
Abbey Road es una famosa calle del barrio londinense de St. John’s Wood. Una de las partes residenciales más bonitas de Londres. Hace prácticamente 80 años la discográfica EMI construyó unos estudios de grabación punteros desde el primer día en tecnología. Se trata de una típica casita victoriana londinense construida en los alrededores de la gran ciudad. A partir de entonces, los EMI studios (nombre original) acogieron numerosos artistas clásicos de todas las épocas, siendo sus clientes mas conocidos y exitosos los Beatles. Desde el 1962 hasta 1969, los Beatles grabaron todos sus discos en los EMI studios (excepto algun tema del álbum blanco de 1968 y el último disco editado por el grupo Let it be de 1970, que fue grabado en los Apple studios en Savile Row nº 3 en el centro de Londres y en el famoso tejado del mismo edificio).
 
George Harrison & Paul McCartney grabando las segundas voces para "Here comes the sun"
Studio nº 2, Julio 1969. Foto Linda McCartney

Grabado en distintas sesiones entre febrero y agosto de 1969 Abbey Road fue el último disco grabado por el grupo (aunque se editó Let it be en 1970 éste se grabó antes). Musicalmente se trata de un disco muy rico. No sólo melódicamente sino incluso líricamente, el punto quizá mas débil de los Beatles. Tiene auténticos clásicos, Something, Come Together, temas comerciales Here Comes The Sun, Octopus’ Garden y auténticas joyas musicales apenas conocidas por el gran publico, Oh! Darling!, Because…La segunda cara es impresionante, tiene una producción divina. Aún mas si se tiene en cuenta la escasa tecnología de la época. El disco se grabó con un 8 pistas inédito hasta el momento. George Martin, el 5º Beatle y un genio manejando las mesas y demás trucos de estudio, realizó un trabajo excelente. Sin George como productor estoy seguro que los Beatles no hubieran sonado igual y por tanto, el éxito hubiera sido otro. Por aquel entonces los Beatles mismos sospechaban que sería el último disco grabado por la banda. El final se acercaba y John y Paul tenían que sacar un gran número de esbozos, canciones que tenían en el tintero e inacabadas. A sugerencia de Paul, optaron por empalmarlas todas en una especie de suite inédita hasta el momento, que ocupa prácticamente toda la segunda cara del disco. Para juntar todas las canciones recurrieron a simples tape loops (efectos de sonido hechos con cualquier cosa). Los mismos Beatles crearon estos efectos de sonido junto con el famoso “double tracking”, inauditos hasta entonces. Fue un disco con pocos trucos de estudio y muy fresco musicalmente. Musicalmente los cuatro Beatles trabajaron de mil maravillas en este disco. El concepto global del disco de Paul, junto con temas preciosos (She came in through the bathroom window, Golden slumbers, Carry that weight and The end). El despertar definitivo de George Harrison con Something y Here comes the sun, los pequeños geniales detalles de John Lennon; Come together, Because, Polythene Pam) y la gran bateria de Ringo en todo el disco con un solo geinal y su aportación con Octopu's Garden.
 
Imagen alternativa, frame nº 4. Foto Ian Macmillan
 
La portada ha pasado de ser un simple esbozo de Paul, con una sessión fotográfica austera una mañana de verano  (concretamente el 8 de agosto de 1969 las 11.35h de la mañana) a ser una imagen infinitamente imitada diariamente por millones de personas que se acercan cada día a la calle honónima. Me encanta la fotografía de la portada del disco. Creo que es genial y realmente el fotógrafo para la ocasión Ian Macmillan la clavó por completo. La sesión duro 10 minutos durante el cual se paró el tráfico de una manera más o menos amistosa por un policía. Parar el tráfico en Abbey Road es prácticamente imposible porque siempre esta llena de coches y buses circulando. Eran las 11.35 de una calurosa mañana de verano en Londres. Los Beatles engañaron a sus fans por completo puesto que solían a aparecer por el estudio a las 2.30 del mediodía para iniciar las grabaciones. Por supuesto a ésa hora del mediodía las puertas del estudio estaban llenas de fans esperándoles. Pero ésa mañana de verano no había nadie, por eso la foto sale prácticamente desierta. Macmillan se colocó en frente con una escalera para coger el ángulo correcto. Los Beatles cruzaron varias veces el paso de cebra entre Abbey Road y Grove End Road. Se tomaron un total de 6 imágenes con cámara de medio formato 6x6 y posteriormente el mismo Paul McCartney eligió la foto de la portada entre las transparencias. Cuando digo que el fotógrafo la clavó es porque literalmente fue así. Si observas las 5 imágenes restantes que se quedaron fuera te das cuenta del valor que puede tener una simple imagen. Las descartadas están llenas de errores, sea por posición de los mismos Beatles, sea por el tráfico. La foto ha pasado de ser una simple imagen del último disco grabado por la banda ha ser toda una icona mundial. Poco después de la edición del disco a finales de setiembre de 1969, un disc jockey norte Americano fabricó una historia muy curiosa que llegó a ser mas que un simple rumor a voces. Según su teoría, Paul McCartney estaba muerto y el de la foto era un impostor. Según cuenta McCartney había muerto en 1966 en un accidente de coche. El mismo 1966 los Beatles empezaron a hacer grabaciones al revés. Les encantaba meter mensajes ocultos en los surcos de los discos. Y la portada de Abbey Road era (en palabras del disc jockey Americano) una procesión fúnebre donde Paul (el descalzo con el paso cambiado) era el difunto. John de blanco simbolizaba el cura, Ringo de negro llevaba el luto y George en vaqueros era el de la funeraria. Tenia otros detalles la portada, el Wolskwagen Beetle blanco aparcado llevaba la matricula de la edad de Paul si hubiera vivido…28 IF.
Ya veis que una imagen vale más que mil palabras, ésta es un buen ejemplo.

Abbey Road, Apple, PCS 7088, 09.26.69; stereo only.
Printed and made by Garrod & Lofthouse Limited.
 
El álbum se editó el 26 de septiembre de 1969. Por supuesto fue número 1 en octubre. Se lanzo el sencillo Something / Come Together, primera cara A de George un tema precioso, mi canción preferida de todo el disco.
A partir de la edición del disco los estudios pasaron a llamarse Abbey Road studios

Wednesday, March 30, 2011

Primrose Hill

Primrose Hill es el nombre de una pequeña colina anexa a Regent’s Park. Es un sitio encantador en el que me gusta pasearme los domingos soleados. Su extensión es mas bien reducida si se la compara con la de Regent’s Park. También es el nombre de un pequeño barrio entre St. John’s Wood y Camden. A primera vista da la sensación de que sea un pequeño reducto hippie Londinense y lo es. Su minúscula extensión comprende unas pocas calles y un par de plazas llenas de diminutas tiendas de ropa, muebles, restaurantes vegetarianos, “bargains” (oportunidades varias), muy típicos y extensos en todo Londres, salas de arte, pequeños negocios de diseño en general, centros de acupuntura y distintas terapias naturales…un sinfín de posibilidades en un espacio realmente pequeño. Pero lo que mas llama la atención son las casas. Realmente envidiables, blancas la gran mayoría, con un estilo Victoriano muy atrevido. Poseen el típico estilo británico pero combinado con tendencias mas modernas, el color, la ornamentación… tienen un toque hippie Ibizenco que me encanta! Pero el que da realmente sentido al barrio es Primrose Hill. Aparte de la colina, el parque comprende unas pocas hectáreas de campo vasto para pasear, tumbarse al sol, hacer algún picnic, ejercicio…Es extremadamente simple pero encantador. Prince of Wales Road separa los dos parques, Regent’s Park y Primrose Hill. Justo en este enclave se encuentra el London Zoo. Una de mis zonas, con personalidad propia, preferidas de Londres

Saturday, March 26, 2011

El meu Sitges


Quan començes a tenir una certa maduresa veus la vida de una altre manera. Fas una mirada amplia enrere i et dones compte de tot el que portes a les teves espatlles. Desde els meus origens. De Andorra no m’hen recordo massa. Potser a vegades mes val no recordar res. De Barcelona, els fonaments de la meva vida. La meva estimada e inolvidable escola Sadako. Allà vaig començar a caminar i on vaig tenir la oportunitat de conèixer gent fantàstica que sempre, porti on em porti la vida, portarè amb mi com un tresor únic i personal.
Sitges per mi no nomès es el poble de la mare i dels avantpassats, és molt mes que aixó. Es una barreja de sentiments, que em lliguen amb el passat i que curiosament tenen un fort vincle amb el present. Recordo els estius de la infantesa, el sol, la calor de la canícula, la tornada a casa de la platja amb la llum de les tres del migdia. La olor dels dinars dels veins pujant descalç pel carrer de la palma, les tempestes tremendes de finals d’estiu. El carrer Jesús de la infancia, can Sofía, els vermuts al texas dels diumenges abans de dinar amb el “tiu vadó”. En Joan de can Carbonell que cada dia al migdia sortía a fer footing fins al final dels seus dies. La casa de la Davallada, entrant sempre per la finestra. Sitges és el mar, la platja de St. Sebastià. La fisonomía de la platja ha canviat força però encara guarda gran part dels meus records de la infantesa mes inocent. Segurament els meus records mes antics es troben en aquella platja. Recordo quan la mare em llençava dins l’aigua com un pes pesat i jo em cagava de por. Segurament tenia un o dos anyets però és el primer record de la meva existència. Anant a pescar a la torreta amb la meva canya de última generació, sense pescar absolutament res però feliç de poder ser prop del mar. Les Festes Majors amb els amics, les samarretes, els esmorzars, les fotografíes. Els nervis sempre a flor de pell.
Una curta però intensa mirada enrere. Amb el millor del passat i un present esperançador…seguim endevant!

Sitges 1964

P.D; Encara que aquest video no sigui de la meva época si que reconec el paisatge de la meva infantesa a Sitges. La Vall, el carrer Barcelona, la Davallada, la Platja de St. Sebastià.